Al celebrar los cumpleaños

Las tradiciones y costumbres chinas relacionadas con la celebración de cumpleaños son de los más curiosas ya desde el primer año de vida. Para los chinos, cumplir un año de vida es un acontecimiento trascendental y, por ello, debe ser celebrado de acuerdo con la llamada tradición Zhuazhou.

Esta ceremonia consiste en que los padres del bebé coloquen una serie de artículos frente a su pequeño/a y dejen que elija libremente el que más le guste o llame la atención. Esta elección, aunque a priori parezca hecha al azar, en realidad será determinante para conocer cuáles van a ser sus inclinaciones y capacidades durante la edad adulta.

La tradición Zhuazhou se viene celebrando ya desde la era de la Dinastía Song (960-1279 d.C.). Es una fiesta meramente familiar, no una ocasión para grandes fiestas ni regalos elaborados. Los regalos que traen los familiares no deben ser lujosos (p. ej. oro o plata), sino que deben limitarse a juguetes o dim sum, uno de los platos típicos de China.

Otra costumbre muy a tener en cuenta si nos relacionamos con alguna persona nativa de China es la que tiene que ver con dar y recibir regalos. En primer lugar, los regalos deben entregarse y recibirse con las dos manos, nunca con una solamente.

Además, no está bien visto abrir el regalo si quien nos lo ha regalado está aún delante de nosotros: se debe esperar a que se haya ido. Al contrario, se considera de buena educación contenerse, aunque también podemos esperar a que la otra persona insista en que lo abramos o incluso preguntar si podemos hacerlo.

Volviendo al tema de los colores, se debe evitar envolver los regalos en envoltorios de papel blanco o negro, ya que, como hemos dicho anteriormente, estos son los colores representativos de lo negativo (la muerte o la mala suerte).

Por último, otra de las tradiciones chinas por excelencia al cumplir años es la de tomar los famososfideos de la longevidad o sau mein acompañados de bollos. Se trata de unos fideos que pueden medir incluso 1 m de longitud en representación de una vida próspera, larga y saludable. Es por ello que trocear los fideos o morderlos está considerado un acto que llenará nuestras vidas de mala suerte, ya que esto significaría que “acortamos” nuestra vida.

En el día a día, estos fideos se llaman yi mein o fideos e-fu o yify y están hechos a base de huevo y harina de trigo. Su color es amarillo-dorado y su textura resulta dura y esponjosa al tacto a causa del agua carbonatada con la que se elabora la masa. Se consumen sobre todo en el sur de China y Hong Kong, aunque hoy en día se comercializan secos en envases de plástico.

 

 

El significado de los colores

Los colores son elementos clave dentro de la cultura china, herencia de la creencia que los rodeaba en la Antigua China. Así, se consideraba que los colores simbolizaban la posición social de las personas. Hoy en día, sin embargo, este uso ha quedado obsoleto y los colores únicamente tienen un significado concreto.

El amarillo, por ejemplo, era el color de la nobleza y las clases privilegiadas. En resumen, era el color de los emperadores y las emperatrices, los príncipes y las princesas, y ellos poseían el derecho exclusivo a vestir con ropas de dicho color. Pero ¿por qué el color amarillo? Debido a que era el color de la tierra, ya que la agricultura juega un papel de suma importancia en la economía china.

El negro y el blanco, en cambio, representan valores negativos como la muerte y la mala suerte. Es por esto que el color del vestido de novia en las bodas chinas no es blanco, y los objetos, tarjetas de invitación y demás elementos relacionados con la boda tampoco son blancos, sino rojos.

El color rojo es el color de la esperanza, la buena suerte, la animación, el progreso, la belleza… En definitiva, representa todo lo bueno y, por eso, es el color con el que visten los novios en la boda. También la bandera china es de color rojo como forma de representar estos valores.

 

Al contraer matrimonio

En la China antigua, los hombres podían tener tantas concubinas como quisieran tras contraer matrimonio por primera vez. No obstante, esta costumbre cambió gracias a una ley que se impuso a partir de los años 50, según la cual un hombre solo podía contraer matrimonio con una sola mujer.

Aunque esta tradición haya cambiado hoy en día, algunas costumbres provenientes de la China antigua se han conservado hasta nuestros días. Los hoy se puede escoger libremente quien será tu marido o mujer, mostrar respeto hacia los padres del otro sigue siendo un valor fundamental.

Antes de casarse, por ejemplo, deben visitar formalmente a los padres del otro. Cuando el hombre visita a sus futuros suegros, debe llevar consigo una serie de regalos desposorios como forma de mostrar sus intenciones sinceras y como símbolo del amor que siente hacia su pareja.

Además, una vez prometidos, los novios deben escoger cuidadosamente la fecha de su boda. Al igual que para escoger el nombre del bebé, la fecha de la boda debe basarse en el calendario lunar chino para atraer a la buena suerte.

En cuanto a la boda en sí, el color rojo es el predominante, dado que es símbolo de amor, fidelidad y prosperidad. El día de la boda (llamado hun qi), la mujer llevará el rostro cubierto totalmente por un velo de color, una vez más, rojo.

 

Hilo rojo del destino

El hilo rojo del destino es una creencia muy extendida no solo en China, sino en toda Asia Oriental, ya que procede de la mitología china y japonesa. De acuerdo con la leyenda, existe en un lazo afectivo o “hilo rojo del destino” que viene con las personas que están destinadas a amarse desde su nacimiento.

Este hilo existe incluso antes de que estas personas vayan a conocerse y es inquebrantable, aunque sí que puede estar más o menos tenso, según lo fuerte que sea el vínculo existente entre estas personas. Literalmente, el texto de la leyenda dice lo siguiente: «Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper».

Es por esto que existen varias expresiones en japonés o chino en las que se hace referencia al hilo rojo, como por ejemplo en estamos tendiendo puentes con hilos rojos o estamos tirando fuerte del hilo rojo.